Cesky Krumlov es un pueblo encantador en la República Checa, ubicado en un meandro del río Moldava (Vltava), no lejos de la frontera con Austria. El centro histórico de Cesky Krumlov, en 1992, fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
La primera mención de Cesky Krumlov se hace en un documento de 1253 donde el lugar se indica como “Crhumbenowe”. El desarrollo de la ciudad tuvo lugar con el gobierno de los señores de Rozmberk, a partir de principios del siglo XIV y hasta todo el siglo XVI. En este período, se construyeron nuevas iglesias, monasterios y palacios, Cesky Krumlov se convirtió en un importante centro comercial. En 1601 la ciudad fue cedida al emperador Rodolfo II. Durante la Guerra de los Treinta Años sufrió la ocupación de tropas extranjeras (imperiales, bávaras y suecas) en varias ocasiones.
QUÉ VER: PRINCIPALES ATRACCIONES DE CESKY KRUMLOV
Situada a orillas del río Moldava, a medio camino entre Ceske Budejovice y el lago Lipno, la ciudad de Cesky Krumlov se construyó alrededor del castillo del siglo XIII. Representa un ejemplo importante de un pequeño centro urbano medieval en Europa central, cuya arquitectura se ha mantenido intacta a lo largo de los siglos.
La mayoría de los edificios del centro histórico, de estilo medieval, renacentista y barroco, datan de los siglos XIV-XVII. Muchos edificios están decorados exteriormente con frescos o grafitis.
UN MAGNÍFICO CASTILLO
El castillo del siglo XIII domina la ciudad y el Moldava desde lo alto de una pared rocosa, y es el segundo en toda la nación, después del de Praga, en tamaño e importancia. Este castillo está formado por dos edificios conectados entre sí y flanqueados por jardines del siglo XVIII. Se puede visitar el castillo, y en su interior hay salas y pasillos con frescos, un hermoso patio decorado, un antiguo teatro barroco (1766), una torre renacentista con frescos.
Esta hermosa ciudad contiene más de 300 edificios históricos en un ambiente absolutamente incomparable. El pueblo es pequeño y se puede visitar fácilmente en un día, pero para apreciar su ambiente es recomendable quedarse al menos una o dos noches. Entre los museos para recordar se encuentra el dedicado al pintor Egon Schiele, que vivió aquí durante un período de su vida.
En los alrededores hay interesantes excursiones para realizar, como la del antiguo monasterio de Zlatá Koruna, con su iglesia gótica y claustro del siglo XIII, que se encuentra a tan solo 10 km del pueblo. En Vyssi Brod hay un antiguo claustro con biblioteca y galería de arte. Mientras que Prachatice es una ciudad medieval característica. El castillo de Hluboká se encuentra a 30 km de Cesky Krumlov. Se pueden realizar hermosos paseos en el cercano Parque Nacional de las Montañas Sumava, que es el parque nacional más grande de la República Checa.